COn
ſsagrar non deue el clerigo el cuerpo de nue
ſstro
ſseñor
IESV Chri
ſsto, quãdo dixere la mi
ſsſsa, a menos, de auer e
ſstas tres co
ſsas
d pan, e vino, e agua. E e
ſste pan, a que llaman Ho
ſstia, deue
ſser fecho de farina de trigo
e, ama
ſsada tan
ſsolamente con agua
f,
ſsin leuadura
g, e
ſsin otro mezclamiento ninguno
h: e deue lo fazer el clerigo muy limpiamen te. E non deue poner vino
ſsolo en el caliz, mas con agua, e amos los deue y mezclar.
i E e
ſsto es
k, porque
ſsalio del co
ſstado de nue
ſstro
ſseñor Ie
ſsu Chri
ſsto, quando le dieron con la lança,
ſsangre, e agua. E deue mas poner del vino
l, que del agua. E e
ſste pan muda
ſse verdadera mente
m, en el cuerpo de nue
ſstro
ſseñor Ie
ſsu Chri
ſsto: e el vino, e el agua, en
ſsu
ſsangre, por el poder de Dios, e por las palabras
ſsantas que dize el clerigo, que dixo nue
ſstro
ſseñor Ie
ſsu Chri
ſsto, en el dia
ſsanto del jueues de la cena, quando tomo el pan e el vino, e dixo a los Apo
ſstoles: e
ſste, es mi cuerpo, e la mi
ſsangre, e q̃n do e
ſstas palabras dize el clerigo, deue alçar la ho
ſstia, que la vea el pueblo. E e
ſstõce deuen todos fincar los hinojos
n e alçar las manos a Dios, e dezir a
ſssi. Adoro te Ie
ſsu Chri
ſsto, e bendigo el tu
ſsanto no me, porque redemi
ſste el mundo, por el tu cuerpo, e por la tu
ſsangre. O pueden dezir otra oracion, de aquellas que
ſsuelen dezir en aquella
ſsazon.