La segvnda causa i razon, que
assimesmo dio principio, como diximos, à introducir estas
encomiẽdasencomiendas, i continuarlas, que fue el entretener con ellas à los primeros
Conquistadores, i Pobladores, i otros hombres nobles, i de valor en
aquellas provincias, para
q̃que las poblassen, ennobleciessen, i defendiessen, no es de menor peso, i justificacion à mi ver, ni al del prudente, i
entendido Padre Ioseph de Acosta,
el qual reconoce, que fuera impossible conservarlas, siendo tan
remotas, i dilatadas, si los mesmos
que las
descubrierōdescubrieron, ganaron, i po|
blaron, no las
guardarāguardaran, i defendieran, refrenando las licencias, i insolencias de los Indios ya reducidos, i de otros sus comarcanos, i
haziendolos, que se acabassen de allanar, i acostumbrar à nuestras leyes, i à nuestros Reyes.