Fuera, de que estuvieron tan lexos los señores Reyes Catolicos,
de pretender algun interes temporal en la concession de estos diezmos, que antes en su
tiẽpo
tiempo
suplie
ron de sus rentas los muchos gastos, que se huvieron de hazer, en
disponer todo lo Eclesiastico, i espiritual de las Indias, i en las missiones de tantos Sacerdotes, i Religiosos, como à ellas embiaron;
lo qual continuan oy sus sucessores,
dādo
dando
de sus Reales caxas quinientas mil maravedis de renta cada año à los Obispos, à titulo de
congrua sustentacion, i à este respeto à los demas Prebendados, i
Beneficiados, donde los diezmos
no llegan à bastar para ella. I donde llegan, se los han dexado, ò redonado liberalmente, reservando
solo para si los dos Novenos, que
llaman, en la forma
q̃
que
diremos luego en otro capitulo,
dōde
donde
trataremos de la
erecciō
ereccion
de las Iglesias.