EN e
ſste mi
ſsmo titulo
ſse houiera de tractar
Iuego que
cõtractocontracto es
de el Iuego, porque en effecto es Contracto que
ſse reduze a la e
ſspecie de el
ſseguro (
q̃que
arriba dixe) que era Apue
ſsta, porque no es el
Iuego otra co
ſsa,
ſsino Apue
ſsta que
ſsuccede e
ſsto, o no
ſsuccede, Iuegan dos a los naypes,
cõuienenconuienen entrambos en que tales puntos tienen
tal valor, y en que en ygualdad
ſse prefiera la
mano, debaxo de e
ſsto apue
ſstan, que me
entrãentra
mas o menos puntos que a vos? E
ſste es el Iuego, el qual
ſse parte en tres e
ſspecies. Vna don
DiuiſiõDiuision de
el Iuego.
de todo es Sciencia: otra donde todo es Ventura, otra compue
ſsto de Ventura y Sciencia;
Iuego de
ſsciencia es el que con
ſsi
ſste en
ſciẽciasciencia
como el axedrez y marro de punta, que tam
bien llaman las damas, porque no entro con
mas ventaja que mi contrario, y veo todo lo
que el puede hazer, y el lo que yo, puede
ſse e
ſste Iuego dezir de
ſsciencia
preciſamẽteprecisamente, y no
ſsiento otro, porque la Pelota grande y chica
los bolos, la argolla, que
admitẽadmiten de
ſstreza, muchas co
ſsas
puedẽpueden ſsucceder que e
ſstoruen el arte, y de
ſstreza de el Iugador, como
ſsi la pelota
pica en vna china,
ſsi
ſse le rebienta,
ſsi bota mal,
ſsi el viento
ſse la lleua a vna parte o a otra, lo
mi
ſsmo en los bolos,
ſsi e
ſsta el
ſsuelo humido, y
aunque le dio con la bolano quiere caer,
ſsi le
dio (ha
ſsta echarle fuera de
ſsu
ſsitio) y le quedo enhie
ſsto, y otros ca
ſsos
ſsemejantes, los quales no pueden
ſsucceder en el axedrez, porque
ſsolo con el ingenio
ſse juega, y por e
ſsto es de
pura
ſsciencia, Iuegos de fortuna
ſsola
ſson, todo genero de dados, y los mas que hay en naypes, porque no
ſsirue nombrarlos,
q̃que cada quinze dias
ſse truecan los nombres de los Iuegos
antiguos, y
ſse
inuentãinuentan otros nueuos. Todo a|
quel juego que con
ſsi
ſste en ca
ſso es de pura fortuna, que
ſsi yo echo
ſseys puntos
cõcon los dados
Iuego đde fortuna, o ventura.
vna vez, y luego echo quinientas vez es los dados para echar otros
ſseys puntos, puede
ſser
q̃que
en todas quinientas no los eche, y otro los echara todas las vezes arreo. E
ſsto llama Ari
ſsto
teles ca
ſso (y muy bien) porque ni en mi es falta de
ſsciencia no echarlos
ſseys puntos, ni es
ſsciencia en el otro echar los cada vez:
ſsino vn
acaecimiento ca
ſsual de que no
ſse puede dar razon. De la tercera e
ſspecie de juegos compue
ſstos de fortuna y
ſsciencia
ſson, todos los juegos que
ſse fundan en ca
ſso, y de
ſspues hay election de aquel ca
ſso echarlo a vna parte o a otra, demanera que
ſsiempre precede el ca
ſso o
fortuna, como el Iuego de las Tablas, que
ſse
funda en el punto que echa el dado, mas de
ſspues de echado tiene election de echar a vna
parte o a otra aquel ca
ſso. Aquella election es
la
ſsciencia, que haura vno que (con acudirle
medianamente)
ſse aprouechara tambien de
ſsu
ſsciencia, que gane mas que otro a quien le entre muy bien lo de fortuna, y
ſsepa gouernar
ſse
mal en la
ſsciencia. Lo mi
ſsmo es en los naypes,
todo juego (que llaman de nueue, a doze cartas) que de
ſspues de barajadas a el repartirlas,
es ca
ſso entrar me buen juego o malo, y en e
ſsto no puede hauer lugar la
ſsciencia, mas de
ſspues de hauerme entrado, di
ſsponer de las cartas de vna manera o de otra, es
ſsciencia, y
ſsera
lo mi
ſsmo que el juego de las tablas. A e
ſsta e
ſspecie
ſse reduzen todos los juegos de pelota,
argolla, bolos, chueca, y (por la mayor parte)
todos los que con
ſsi
ſsten en habilidad de manos o cuerpo: y todos los que no con
ſsi
ſsten en
ca
ſso
ſsubito, quiero dezir los que
encomençãdoencomençado ſse no
ſse acaban: porque el dado en començando a echar
ſseys (que le acabo de echar)
ſse
acaba el juego, y e
ſste es
đde fortuna: mas
ſsino
ſse
acaba en comentando, queda que es juego
cõpueſtocompuesto. Entendida e
ſsta diui
ſsion,
ſsera facil conocer qual juego es de qual
ſspecie, y
ſsobre la
que
ſstion principal (que pre
ſsuponen todas las
de mas)
ſsi el juego es licito o no, no porne mi
opinion, porque es riguro
ſsi
ſssima, cada vno vera en e
ſsto lo quele cumple, y por e
ſsto entendera lo que yo
ſsiento, mas dexandolo indeci
ſso, pre
ſsupue
ſsto que el juego
ſsea licito, tomandolo en los ca
ſsos y quantidad que de derecho es permitido jugar, veamos acerca de la forma, en que puede hauer cargo de
cõcienciaconciencia o
no? y pongo vna conclu
ſsion general. Toda
vẽtajaventaja (natural o artificial) que haya en el juego
Regla de el
juego caſsual.
ca
ſsual, haze que la ganancia
ſsea mal lleuada, la
razõrazon es, la mi
ſsma que dixe en el
ſseguro de los
mercaderes, que la fortuna y rie
ſsgo ju
ſstifican
lo que
ſse lleua por el
ſseguro, y
ſsi vno haze
ſseguro: de lo que
ſsabe que lo e
ſsta, y que no corre rie
ſsgo, es obligado a la
reſtituciõrestitucion. Lo mi
ſsmo de parte de el que a
ſsſsegura
ſsu mercaderia,
ſsi
ſsabe que e
ſsta perdida, no puede lleuar el valor de ella con buena conciencia, a
ſssi en el juego, en e
ſstando vno cierto de lo que es, no puede lleuarlo, y lo que lleua e
ſsta obligado a re
ſstituyr, porque ce
ſsſsa la cau
ſsa que ju
ſstifica el
Iuego (
ſsi alguna hay
q̃que le ju
ſstifique)
q̃que es el rie
ſsgo que
ſse corre. En e
ſsto entra todo lo de fal
ſsedad que
ſse haze en los juegos, como
ſsi juego con dado cargado, o azogado, plomado,
amolado, buydo, de punto doblado, (y otras
fraudes que deue de hauer) es lleuar el dinero
hurtado, porque ni yo puedo dexar de echar
el punto
q̃que qui
ſsiere, ni el otro dexar de echar
el que yo qui
ſsiere, de forma que no hay ventura,
ſsino
q̃que de juego ca
ſsual hize juego de
ſciẽciasciencia y forço
ſso, y a
ſssi es lo mi
ſsmo que de el a
ſsſsegurador, que a
ſsſseguro lo que e
ſstaua
ſseguro. Lo mi
ſsmo es en los naypes, que que qualquiera
ſseña
q̃que le hago, de cerda encaxada, naype cabeçeado, flor de fuera, o punta de dentro
o cercenado para que no
ſse alce, o crecido para dar a alçarle, es robar el dinero. ¶ E
ſsto mi
ſs
mo es, quando no juego con malos
inſtrumẽtosinstrumentos, pero v
ſso mal de los buenos, y e
ſsto con
ſsi
ſste en vna de dos maneras, o por artemia, o ayuda agena. Por arte mia, quando jugando
cõcon
buenos dados los cargo a el echar, de manera que el
pũtopunto que armo en la mano, va
corriẽdocorriendo por la tabla adelante,
ſsin que el dado haga
tumbo (que es en lo que e
ſsta el ca
ſso.) Por e
ſsto
v
ſsaron los Romanos antiguos (que no es
inuẽcioninuencion de ahora) echar los dados, de vn va
ſso,
y no a mano: ya yo he conocido hombre tan
die
ſstro, que en el va
ſso cargaua dos dados (reboluiendolos
quãtasquantas vezes
ſse lo
demandaſsẽdemandassen)
muy mejor que yo lo pudiera hazer con dos
manos, e
ſsto mi
ſsmo es en los naipes, los que hazen la que llaman aluardilla, o hurtan carta, o |
hurtan golpe, o
camodãcamodan,
q̃que es quitar vna baraja y meter otra, todo e
ſsto es robar (mas que
ſsi
ſsaltea
ſsſsen en los caminos)
porq̃porque de el ca
ſso
hazẽhazen
ſsciencia. Con ayuda agena
ſse haze la fal
ſsedad
quando ponen echadizo que vea al contrario, y por
ſseñas declare el juego que tiene, o
ſsi
ſson (lo que dize el refran) dos almohino,
q̃que
ſse conciertan algunos de jugar en tercio, o en
quarto, y hazen pacto
ſsobre la ganancia
q̃que ſse
ganare acel tercero, y ellos
juegãjuegan al
ſseguro porque el que haze la fal
ſsedad no toma para
ſsi el
buen juego,
ſsino dale al compañero con
quiẽquien
tiene hecho el concierto, o le mue
ſstra la carta
que viene, y
deſuellãdesuellan al tercero, que de
ſsto ninguna co
ſsa
ſsabe. E
ſsto es en quanto a la ventaja artificial en
q̃que ninguno pone duda, mas hay
la en la natural, como
ſsi yo juego con mi
cõtrariocontrario, y tengo habilidad de conocer las cartas,
ſsin hazer co
ſsa que no deua. Dan nos a entrambos cartas en juego ca
ſsual, embida me lo
que quiere, conozcole el punto que tiene,
ſsin
que (como e
ſsta dicho) yo haga fraude ni en el
inſtrumẽtoinstrumento, ni en dar le aquel punto. Es la duda
ſsi
conociẽdoconociendo q̃que le gano, le puedo querer el
embite; y tornar a hazer otro? Por la parte afirmatiua (de que lo pueda hazer) es la razon
natural, que yo juego limpiamente, y en
aq̃laquel
ca
ſso no hago delicto, parece que lo puedo lleuar, y hazer todo lo que en mi es para ganar
Mas dexado e
ſsto, ab
ſsolutamente hemos de tener, que lo mi
ſsmo es en la
vẽtajaventaja natural, que
en la ventaja artificial. La razon es la mi
ſsma
q̃que
dixe en el
ſseguro, y para e
ſsto
ſsirue reduzir cada
cõtractocontracto a
ſsus principios naturales de donde
ſse
cõponecompone. A que
ſstos
cõtractoscontractos (a
ſssi el de el
ſseguro como el de el juego, que todo quanto
a e
ſsto es vna co
ſsa)
ſson como hemos vi
ſsto
cõdicionalescondicionales, fundados en condicion ca
ſsual, que,
es la que puede
ſser y no
ſser. Pues
ſsi e
ſsta condicion ca
ſsual
ſse conuierte en nece
ſsſsaria (que es
la que no puede dexar de
ſser) ya dexa el contracto de
ſser condicional, y es puro, y por el
cõſiguiẽteconsiguiente reprouado, y no
ſse puede lleuar lo
que
ſse dio por re
ſspecto de la condicion, a
ſssi
quando dos
ſse a
ſssientan a jugar, es debaxo de
que a cada vno le de la fortuna lo que le cayere, la ventaja artificial quita aquel ca
ſso, y haze que a aquel no le pueda caer lo que
ſsu ventura le diere,
ſsino lo que la
conciẽciaconciencia de
ſsu
cõ
trariocontrario le dexare, e
ſsto es en quanto a el caerle,
mas de
ſspues
đde hauerle caydo, en
quãtoquanto a multiplicar, o diminuyr la
ganãciaganancia, mi ventaja natural (de conocer lo que le ha caydo) haze
q̃que
aquel no
ſsea tan
ſseñor de mi dinero, como yo
de el
ſsuyo, porque ataja la condicion, y no corre por mi dinero el rie
ſsgo
q̃que por el
ſsuyo, de
el mi
ſsmo arte que el a
ſsſsegurador no haze
ſsuyo el
ſseguro, quando
ſsabe que la Nao es llegada, aquella ventaja natural es. Porque ni el
hizo llegar la Nao, ni induze al
ſseñor
đde la mercaderia que la a
ſsſsegure,
ſsino que por otra via
ſsupo
ſser llegada. Y lo mi
ſsmo
ſsi el
ſseñor de la
mercaderia
ſsupo que era perdida, y bu
ſsco a
ſsſsegurador de ella, no lo puede lleuar, y es ventaja natural, porque ni el hizo para que
ſse perdie
ſsſse la mercaderia, ni gu
ſsta de que
ſse le haya perdido. Otra razon porne para lo mi
ſsmo
y que (a mi juyzio) no reciba re
ſspue
ſsta. Pre
ſsu
De el q̃que conoce los
naypes.
pongo como hay muchos hombres que a dos
bueltas conocen por las e
ſspaldas vna baraja
de naypes,
ſsin hazer co
ſsa que no
deuãdeuan, mas de
que es habilidad que dios les dio. Otros las
co
conocen por la punta (que es la raya que e
ſsta
dentro y llaman bruxula)
ſsi e
ſsta ventaja natural no obliga a re
ſstitucion? tampoco obligara la artificial, que
ſse endereça a
ſsuplir el defe
cto de la natura? a
ſssi como yo que
ſsoy corto
de vi
ſsta, no pecco en traer antojos para ver de
lexos, y
ſsuplir por arte el defecto de natura,
ni el falto de memoria pecca en bu
ſscar arte como tenga lo que naturalmente le falta. Pues
ſsi
e
ſsta
vẽtajaventaja natural (de conocerlas cartas) fue
ſsſse permitida? Por la mi
ſsma
razõrazon lo
ſseria la artificial que a aquello mi
ſsmo
ſse endereça
ſsſse,
no digo de hurtar carta, ni de tomar para mi
la que yo qui
ſsiere,
ſsino
ſsolo de conocer el juego que me viene, o la carta de mi
cõtrariocontrario, como con el e
ſspejo almu
ſsto, o con mojar el dedo para imprimirle en la carta que viene, y conocer la pinta, o tener (detras de mi contrario) quien con
ſseñas, o palabras di
ſssimuladas,
o tañiendo vna guitarra haziendo que la tiempla, o mudando el
ſson, o de otra manera, me aui
ſse de el juego que mi contrario tiene. Pues
e
ſsta artificial es tan reprouada como las de
mas artificiales,
ſsigue
ſse que
tãbientambien lo es la natural, a cuyo defecto ella
ſse
endereçãendereçan, no quiero prouar co
ſsa clara, pues en e
ſsto ninguna du|
da puede hauer. Solo en vn ca
ſso
ſse ju
ſstificaria
e
ſsto de la ventaja natural,
ſsi aduirtie
ſsſse de ello
a
ſsu contrario, a
ſssi como el a
ſsſsegurador que
dixe
ſsſse al mercader, yo
ſse que vue
ſstra mercaderia es venida, y e
ſsta en
ſsaluo,
ſsi
cõcon todo e
ſsſso
porfia
ſsſse a a
ſsſsegurar, podria el a
ſsſsegurador lleuar el
ſseguro, y lo mi
ſsmo el
q̃que conoce las cartas,
ſsi aui
ſsa
ſsſse a
ſsu contrario, yo os tengo ventaja en e
ſsto: y con aquella ventaja qui
ſsie
ſsſse el
otro jugar, podria bien y con buena conciencia ganar lo que gana
ſsſse. Mas en e
ſste ca
ſso, an
ſsi el
cõtractocontracto đde el
ſseguro como el de el juego
recibe alteracion, porque
ſse haze contracto
de donacion, que aquel
cõtrariocontrario de el
q̃que conoce las cartas, y el mercader cuya es la mercaderia que
ſse a
ſsſsegura,
ſson vi
ſstos donar puramente aquello que
dãdan, y no
ſse lleua por el
cõtractocontracto condicional.
ReteniẽdoReteniendo e
ſste mi
ſsmo ca
ſso: pregunto,
ſsi vno touie
ſsſse el punto mas
ſsubi
do que puede tener, demanera que es impo
ſssible ganarle; como
ſsi touie
ſsſse el maço a la primera, y fue
ſsſse de mano,
ſsi teniendo e
ſsta certidumbre podria con buena conciencia embidar, y lleuar a los compañeros en aquella mano todo lo que tienen? parece que no, porque
alli no hay duda (conforme al ca
ſso que tengo
pue
ſsto) mas la verdad es en contrario, porque
aquella ventaja es ca
ſsual, y de la fortuna que
le dio aquellas cartas, y el a
ſssiento le hizo de
mano, y ni es natural; ni artificial,
ſsino es lo
q̃que
llama Ari
ſstoteles ca
ſso, y para aquello
ſse a
ſsſsento a jugar, y
ſse
ſsentaron con el
ſsus contrarios:
y a
ſssi lo pueden lleuar con buena conciencia,
e
ſsto es en los juegos ca
ſsuales. En los juegos
compue
ſstos, la ventaja natural no daña, porque es
ſsciencia, como no caya
ſsobre lo que es
de ca
ſso, que entonces obligado e
ſstoy a de
ſscubrirla, y a
ſssi muchos
hõbreshombres đde biẽbien y
ſsin letras
(no mas de guiados por la
razõrazon natural)
quãdoquando juegan, y de
ſscubren el juego de
ſsu contrario, le
aduiertẽaduierten que le cubra. Pues
ſsi yo conozco la carta por las e
ſspaldas, que mas
ſse me da
que verla por la haz. Por e
ſsta mi
ſsma razon
ſse
conuence
ſser verdad (la doctrina vulgar de ju
gadores) que el
q̃que pide en el juego de los naypes partido a
ſsu contrario, hauiendo vi
ſsto
ſsu
juego,
ſsi
ſse le dan es obligado a re
ſstitucion de
ello, porque el partido pre
ſsupone duda, y
q̃que
e
ſste en rie
ſsgo
ſsi le ha entrado, o no, la carta
cõcon
que ha de ganar, y e
ſste rie
ſsgo ju
ſstifica la
ganãciaganancia de lo que lleua por el partido; mas
ſsi el
q̃que
le pide ha vi
ſsto
ſsu juego, y
q̃que no le entro, luego no hay rie
ſsgo, y por el
cõſiguienteconsiguiente hay mala
ſse, y a
ſssi es obligado a re
ſstitucion de lo que
le
dierõdieron. En los juegos de
ſsciencia, quando la
ventaja es clara (aunque no la
ſsepa
ſsino el que
la tiene) es obligado a re
ſstituyr lo que ganare, como el
q̃que juega a el axedrez, o al marro, y
va di
ſsimulando, y encubriendo
ſsu juego con
el
cõtrariocontrario, ninguna duda hay,
ſsino que lleua
mal ganado lo que ganare, porque todo juego (
ſsin
excepciõexcepcion) tiene inclu
ſsa en
ſsi condicion
como he dicho y quando el que en el tiene la
ventaja la di
ſssimula, no ba
ſsta dezir que no haze fraude en el juego, y que
cõcon las mi
ſsmas pieças juega que
ſsu contrario, porque e
ſsto ce
ſsſsa
quãdoquando ſsu
cõtrariocontrario no
ſsabe todo lo
q̃que el juega.
¶ E
ſsto es lo que acerca de e
ſste contracto de
el juego me parece que ba
ſsta, de lo qual creo
que
ſse hara de mi el juyzio que Horacio dize
de Homero, que por hauer loado el vino le tenian por amigo de ello; y a
ſssi me
juzgarãjuzgaran por
tahur: y certifico ante Dios, que ninguno de
los juegos (en que he pue
ſsto exemplo) de dados, y Iuegos ca
ſsuales de Naypes, ni Tablas no
ſse jugar, ni aun
entiẽdoentiendo el valor de las
cartas, mas he ayudado (abogando por ellos)
a los maiores tahures, y fal
ſsarios en e
ſsta materia, que creo que ha hauido en el
mũdomundo,
negãdonegando ellos
ſser en culpa de los delictos que
ſse les
opponian, donde me ha conuenido entender
las fraudes, y engaños
q̃que he apuntado, y a vn
otras que dexo, por el peligro de no aduertir
a quien e
ſsta de
ſscuydado, como acaece a los
confe
ſsſsores, que preguntando en
ſseñana los
penitentes lo que antes quiça no
ſabiãsabian. Sobre
todo tengo por la principal
cõcluſionconclusion de e
ſsta
materia, para no
ſse errar en ella, el refran vulgar, que de los dados lo mejor es no jugarlos.