LImpias e apue
ſstas deuen tener los clerigos las Egle
ſsias
a, e todas las otras co
ſsas que
ſson mene
ſster para
ſseruir a Dios en ellas, a
ſssi como los calices, e las cruzes, e las otras ve
ſstimentas con que dizẽ las horas, e todos los otros paños que ponen por apo
ſstar los altares e las paredes. Ca pues el cuerpo de nue
ſstro
ſseñor Ie
ſsu Chri
ſsto
ſse con
ſsagra en ella, gui
ſsado es que todas las co
ſsas que ha mene
ſster, para
ſseruicio della, que
ſsean muy limpias e muy apue
ſstas. E e
ſstas ve
ſstimentas de paño que
ſson mene
ſster para
ſseruir la Egle
ſsia, non las deuen dar los clerigos a los ornes que v
ſsen dellas en otras co
ſsas
b vanas, e quando las ve
ſstimẽtasque fueren benditas, fueren mene
ſster de
ſse lauar, los diaconos
c con los otros menores de la Egle
ſsia lo deuen fazer, e los corporales deuen lauar los pre
ſstes
d, en bacines muy limpios, e
ſsean toda via guardados para e
ſsto
e, e non los metan a otro
ſseruicio ninguno: e quando e
ſstos paños fueren euegecidos, o rotos, de gui
ſsa que non
ſsean gui
ſsados para v
ſsar dellos, deuẽ los quemar
f, e non los deuẽ vender, nin dar, nin meter en otros v
ſsos que
ſsean a
ſseruicio de los omes. Ca lo q̃ es dado para
ſseruir a Dios, non deue
ſser tornado de
ſspues a otro
ſseruicio. E e
ſsto deue
ſser guardado, porq̃ non
ſse en
ſsañe Dios contra el pueblo, e non le de mantenimiento: a
ſssi como conte
ſscio al Rey Balta
ſsar
g, que tomo los va
ſsos, e las otras co
ſsas del templo de Hieru
ſsalem, e
ſse
ſseruio dellas como non deuia: e de
ſstruyo le porende nue
ſstro
ſseñor Dios, e metio
ſsu reyno en poder de
ſsus enemigos.